Cómo cuidar adecuadamente tus pies
Lo primero que debemos hacer para tener siempre los pies cuidados y perfectos es prestarles la atención adecuada durante todo el año.

En invierno nos volvemos perezosos. Nuestros pies están siempre bajo la protección de botas o zapatos cerrados por lo que, al llevarlos siempre tapados, les abandonamos a su suerte para tiempos mejores. Pero es un gran error.

Nuestros pies sufren en invierno y en verano. En invierno deben soportar el frío, la humedad, los cambios bruscos de temperatura. En primavera comenzamos a mostrarlos con timidez y según el día «loco» que amanezca pasaremos de la bota a la sandalia casi de un día para otro y a finales de primavera, cuando el sol y el calor empiezan a estabilizarse, nos acordamos de ellos y además esperamos que tengan su mejor aspecto ya que los zapatos cerrados y las botas pasan al armario a esperar el otoño.

Pero ¿si no hemos hecho un mantenimiento adecuado durante el invierno y el comienzo de primavera como vamos a esperar que, el primer día de sandalias, estén perfectos?

Principales problemas que nos encontramos en primavera cuando no hemos cuidados nuestros pies en invierno

Sequedad en la planta del pié o en los talones
Rozaduras de zapatos o botas
Grietas
Callos
Juanetes
Sudoración excesiva
Olor de pies
Uñas mal cuidadas, agrietadas o falta de vitaminas
Trucos para tener pies cuidados y perfectos en cualquier época del año
Estos trucos para tener pies cuidados y perfectos son consejos que debemos aplicar en todas las estaciones del año. Si durante el duro invierno eres capaz de mantener cierta rutina con tu pedicura, ya sea en casa o profesional, el primer día de sol que te apetezca liberarlos de nuevo estarán en un estado más que aceptable.